Cargar un vehículo eléctrico debe ser sencillo—y, ante todo, seguro. El cable adecuado o el cargador portátil correcto demuestra su seguridad con certificaciones verificables, resistencia ambiental robusta y sólidas protecciones eléctricas. Esta guía muestra exactamente qué comprobar—dónde están las protecciones (en la EVSE/punto de carga, en la instalación eléctrica o en la propia construcción del cable) y cómo verificarlas—para que puedas cargar con confianza en el día a día.
Certificaciones que importan: CE, UKCA y TÜV (qué acreditan y por qué son imprescindibles)
Empieza confirmando el marcado CE (UE) y/o UKCA (Reino Unido), vinculados a las directivas pertinentes de seguridad, EMC y RoHS; son marcas legales de conformidad, no logotipos de marketing. Los sellos de ensayo de terceros acreditados (p. ej., TÜV) añaden una tipificación independiente conforme a normas como IEC/EN 61851 y 62196. La etiqueta y la ficha técnica deben coincidir: mismo modelo, datos eléctricos, referencias normativas y datos de fabricante trazables.
Grados de protección IP explicados: por qué IP67 protege incluso si el cable cae en un charco
IP67 en cables de carga tipo 2 significa estanco al polvo (6) y protegido contra inmersión temporal (7); es apto para lluvia, salpicaduras y una caída accidental en un charco mientras las juntas estén intactas. Verifica que tanto las carcasas de los conectores como cualquier caja de control integrada en el cable alcancen el grado indicado. IP67 no equivale a inmersión prolongada ni a limpieza a alta presión—inspecciona juntas tras lluvias intensas y no uses equipos con humedad interna visible.
Protecciones eléctricas clave: sobretensión, sobrecorriente y subtensión
La protección frente a sobretensiones transitorias suele estar en la wallbox o en el cuadro eléctrico (SPD); algunos cargadores portátiles incorporan supresión interna. La protección contra sobrecorriente depende de la sección correcta del cable y de los límites de corriente que la EVSE comunica por el Control Pilot (p. ej., 8/10/13/16/32 A seleccionables). La lógica de subtensión impide operar con tensiones inseguras y evita traqueteo del contactor, calentamiento y disparos intempestivos.
Protección de puesta a tierra: trayectos de fallo seguros y continuidad de PE
Los equipos de calidad verifican la presencia e impedancia del conductor de protección (PE) antes de energizar y abren el contactor inmediatamente si se pierde el PE. En Europa se requiere protección diferencial adecuada: un ID (RCD) Tipo A más detección de 6 mA CC en la EVSE, o un RCD Tipo B. Los cables pasivos Modo 3 dependen de la EVSE y del vehículo para estas comprobaciones—por eso la integridad del conector y de los pines es crítica.
Protección térmica: monitorización de temperatura y desconexión automática por sobrecalentamiento
Sensores de temperatura en el enchufe de red, en la caja de control y/o en el conector del vehículo permiten reducir potencia o desconectar antes de que se sobrecalienten pines o plásticos. Las wallbox suelen vigilar temperaturas de la PCB/contactor; los cables pasivos dependen de una correcta corriente nominal y de una baja resistencia de contacto. Mensajes claros de sobretemperatura evitan reinicios arriesgados.
Seguridad del conector: carcasas robustas, calidad de contacto y bloqueo seguro
Busca carcasas resistentes a impactos, capuchones de sellado intactos, cierres firmes y alivios de tensión moldeados. Contactos de alta calidad mantienen baja resistencia durante miles de ciclos; picaduras o holguras indican sustitución. Donde se exige, las persianas y los diseños a prueba de contacto reducen la exposición a partes en tensión.
Construcción del cable: sección de conductor, aislamiento, alivio de tensión y protección contra flexión
Ajusta la sección del conductor a la corriente y fases para mantener baja la elevación térmica y elige cobre flexible de hilos finos para mayor durabilidad. Una cubierta exterior resistente a UV y abrasión y una correcta bota antiflexión reducen la fatiga en la entrada del conector. Elige una longitud práctica—los cables largos aumentan la caída de tensión y el peso.
Control y comunicación: integridad CP/PP y lógica de “arranque seguro”
El equipo conforme Modo 2/3 supervisa la máquina de estados del Control Pilot (CP) y lee el Proximity Pilot (PP) para que la EVSE nunca anuncie más corriente de la que soporta el cable. “Arranque seguro” significa que el contactor solo cierra tras verificar cableado correcto, tensión de red adecuada, PE presente, autotest del RCD y un handshake válido. Un manejo estable de fallos evita conmutaciones rápidas que castigan relés y conectores.
Durabilidad en condiciones reales: resistencia a la intemperie, a la abrasión y vida útil
Para uso exterior deben indicarse rango de temperatura de servicio, resistencia a UV y ciclos de acoplamiento validados. Las carcasas deben soportar caídas habituales; las cubiertas han de resistir la abrasión de la entrada de vehículos y la suciedad. Inspecciona periódicamente cortes, zonas aplastadas, alivios de tensión flojos y pines decolorados—señales tempranas de servicio o sustitución.