El Modo 1, el Modo 2, el Modo 3 y el Modo 4 son distintos métodos de carga de vehículos eléctricos (VE), cada uno con características y aplicaciones específicas. La carga en Modo 1 implica el uso de una toma doméstica estándar sin funciones adicionales de comunicación o seguridad, que es la menos segura y, por tanto, raramente recomendada. La carga en Modo 2 utiliza un enchufe normal, pero incorpora un sistema de control y protección en el cable (ICCB) que proporciona seguridad adicional. La carga en Modo 3 se realiza a través de puntos de carga específicos que se comunican con el vehículo para regular la corriente y garantizar la máxima seguridad. Se usan principalmente en puntos de carga públicos y domésticos. El modo de carga 4 es la carga rápida mediante corriente continua (CC) y requiere puntos de carga específicos que alimentan directamente la batería del vehículo, lo que es mucho más rápido que los otros modos y suele encontrarse en autopistas o en puntos de carga comerciales.