¿Te preguntas si es posible alargar el cable de carga de tu coche eléctrico?
La respuesta no es tan sencilla. Técnicamente, sí es posible. Pero la verdadera pregunta es: ¿deberías alargar el cable de carga? Por motivos de seguridad no es recomendable, y además no está permitido por la normativa europea.
Extensión de cables de carga para vehículos eléctricos
Aunque alargar el cable de carga puede parecer una solución práctica para alcanzar tu coche con más comodidad, esta opción conlleva serios riesgos. Usar alargadores estándar – incluso los de alta resistencia – puede provocar sobrecalentamiento, caídas de tensión o incluso incendios, especialmente debido a la alta carga eléctrica que requiere la recarga de un vehículo eléctrico. Las normativas europeas de seguridad prohíben explícitamente el uso de extensiones no homologadas para este propósito. Estas normas no solo protegen tu vehículo y tu hogar, sino también la seguridad pública y la estabilidad de la red eléctrica. Los puntos de carga y cables para vehículos eléctricos están diseñados como sistemas integrados, probados y certificados bajo estrictos estándares de rendimiento y seguridad.
Si tu cable actual no llega cómodamente hasta tu vehículo, la solución adecuada y segura es invertir en un cable de carga más largo y homologado, compatible con tu conector (Tipo 1 o Tipo 2), y que cumpla con todas las normativas eléctricas vigentes. En Voldt, ofrecemos cables de carga certificados en varias longitudes —incluyendo opciones extralargas de hasta 40 metros— para brindarte la flexibilidad que necesitas sin comprometer la seguridad ni el cumplimiento normativo. Nuestros cables están completamente probados para soportar la carga eléctrica requerida y cumplen con todas las regulaciones europeas. Al final, los riesgos de utilizar soluciones no oficiales superan con creces cualquier conveniencia temporal. Elegir una opción aprobada es, sin duda, la única decisión responsable.